¿Te da vueltas toda la habitación? ¿El suelo se balancea? ¿Tienes la sensación de que te caes? Es posible que estés padeciendo de Vértigos o Mareos, estos problemas son muy frecuentes en la actualidad.
El 80% de la población ha sufrido un episodio de vértigo en su vida, pero en numerosas ocasiones los pacientes confunden estos términos, a continuación, te vamos a enseñar como diferenciar estas entidades clínicas.
¿QUÉ SON Y CÓMO PODEMOS DIFERENCIAR LOS MAREOS DE LOS VÉRTIGOS?
La persona que se vea afectada por un episodio de vértigo o mareo presentará estos síntomas:
Mareos
- Pérdida de estabilidad o desequilibrio.
- Aturdimiento.
- Dificultad visual, visión borrosa y sensibilidad a la luz (fotofobia).
- Sensación de pérdida del conocimiento.
- Pérdida de la conciencia o desmayo.
Vértigos
- Sensaciones de giros que aparecen de manera súbita.
- Visio doble o perdida de esta.
- Náuseas.
- Perdida de fuerza en brazos o piernas.
- Dificultad para ver o hablar.
- Perdida de control de la vista.
- Síntomas en el oído: pérdida de audición, sensación de escuchar golpes rítmicos, etc.
¿POR QUÉ SE PRODUCEN LOS VERTIGOS?
Hay varios factores que influyen en su aparición. Entre ellos podemos encontrar los siguientes:
- Movimientos repentinos o bruscos de la cabeza. Este tipo de vértigo suele ser el más común en consulta, desde la fisioterapia existen técnicas con las que podemos solucionar este problema de manera rápida y eficaz.
- Durante una infección con o sin fiebre del oído interno (neuritis aguda): incluye la aparición espontánea de vértigo intenso y constante, que puede persistir durante varios días, junto con mareos y náuseas, así como también vómitos y desequilibrio.
- Envejecimiento: es causado por el deterioro a los órganos situados en el oído principalmente que contribuyen a la orientación y equilibrio. Se presentan mareos al levantarse, así como también mareos repentinos en las actividades diarias, acompañados de marcha inestable.
- Estrés y emociones intensas.
¿CÓMO PODEMOS PREVENIRLOS?
Antes de que aparezcan podemos intentar prevenirlos:
- Entrenar el sentido del equilibrio.
- Reducir estrés o situaciones emocionales intensas a través del ejercicio.
- Evitar alcohol y nicotina.
- Mejorar la calidad del sueño.
- Evitar cambios bruscos de postura, sobre todo al levantarse realizarlo de manera lenta y progresiva.
- Controlar niveles de azúcar regularmente.
- Evitar agotamiento físico intenso.
DESDE LA FISIOTERAPIA PODEMOS AYUDARTE
Cada intervención será específica para cada caso y estará individualizada para cada paciente. Entre las técnicas de tratamiento que utilizamos en fisitoerapia podemos encontrar:
- Maniobras para solucionar el vértigo postural; Maniobra de Epley y maniobra de Semont.
- Entrenamiento de la marcha y el equilibrio estático y dinámico para reducir el riesgo de caídas en el paciente.
- Ejercicios para mejorar la coordinación oculomotora, en donde se trabaja el reflejo vestíbulo ocular.
- Ejercicios de habituación para ayudar al cerebro a corregir las sensaciones de vértigo percibidas.
- Movimientos especializados de cabeza y cuello.
VÍDEO CON VALORACIÓN DEL VÉRTIGO POSTURAL
Si tienes algún síntoma de los anteriores, ponte en contacto con nosotros, te ayudaremos.
Lorenzo Castillo Ballesta.
Fisioterapeuta col. 6778.
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