Si lo has practicado alguna vez, seguro que sabes que la escalada es un deporte que exige un nivel de control y precisión altísimo, y los pies juegan un papel fundamental en el rendimiento de un escalador. Para lograr un buen apoyo y adherencia en la roca o el rocódromo, es muy importante contar con los pies de gato adecuados. Este tipo de calzado debe ajustarse bien al pie sin causar daños, pero encontrar el equilibrio entre rendimiento y comodidad suele ser bastante complicado. En este post vamos a hablar de qué requisitos deben cumplir los pies de gato para proteger tus pies y como puedes evitar lesiones al usar pies de gato.
¿Por qué es tan importante el calzado en la escalada?
A diferencia de otros deportes, en la escalada el pie soporta todo el peso del cuerpo en superficies muchas veces irregulares, y el apoyo puede darse solo en la punta de los dedos o en zonas reducidas de contacto. Los pies de gato son muy importantes precisamente porque gracias a su diseño y suela adherente, permiten a los escaladores alcanzar una precisión y control mayor en sus movimientos y favorecen la sujeción al escalar. Sin embargo, para conseguir esa firmeza, los pies quedan comprimidos en el calzado, lo que a largo plazo puede provocar dolores y lesiones si no tenemos cuidado.
¿Qué requisitos debe cumplir un pie de gato para evitar lesiones?
Elegir los pies de gato adecuados no es solo cuestión de encontrar los que nos parezcan más cómodos, sino también de asegurarnos de que cumple con ciertos requisitos para evitar lesiones a medio plazo:
- Ajuste sin dolor: Los pies de gato deben quedar bien ajustados, pero no hasta el punto de generar un dolor excesivo. Sí que es cierto que este tipo de calzado debe ser un poco apretado, pero si sientes dolor constante o la sensación de opresión es muy grande, pueden terminar provocando deformidades en los dedos con el tiempo.
- Punta adaptada al tipo de escalada: Dependiendo del nivel y tipo de escalada que practiques, deberías elegir entre un calzado de punta simétrica (más cómodo y recomendado para principiantes) o asimétrica (más técnica, ideal para escaladores avanzados). La elección de una u otra debería basarse en el estilo de escalada y la frecuencia con la que entrenas.
- Material de la suela: La dureza de la suela y el tipo de goma afectan tanto la adherencia como la flexibilidad del pie de gato. Una suela blanda permite más sensibilidad en los movimientos técnicos, mientras que una dura puede dar mayor estabilidad en apoyos reducidos. Como es lógico, la calidad de los materiales es muy importante para evitar lesiones al usar pies de gato ya que los materiales o las suelas de mala calidad generan roces y todo tipo de problemas en los pies.
- Tamaño: Es muy habitual que los escaladores elijan pies de gato de una talla más pequeña para mejorar el control y ajustarse mejor a las superficies cuando están escalando. Sin embargo, usar una talla demasiado pequeña puede provocar heridas en los pies, uñas encarnadas si el calzado ejerce mucha presión en la zona de las uñas e incluso deformar los dedos y dejarlos en garra.
Las lesiones en los pies más comunes al usar pies de gato
Unos pies de gato mal elegidos o demasiado ajustados pueden provocar problemas que pueden llegar a volverse crónicos. Vamos a hacer un repaso a algunos de los más habituales:
- Uñas encarnadas: La presión constante sobre los dedos puede hacer que las uñas se encarnen o que sufran traumatismos que lleven a la formación de uñas negras, engrosadas o con hongos. Si sientes dolor en la zona de las uñas, intenta probar otra talla o tipo de calzado para evitar problemas que te podrían acompañar durante mucho tiempo.
- Deformidades en los dedos: Como decíamos hace unas líneas, el uso continuo de pies de gato muy ajustados puede provocar deformidades como dedos en garra o martillo, que generan dolor y dificultan el uso de calzado normal fuera de la escalada.
- Callos y durezas : La fricción constante en zonas como el talón o los bordes del pie favorece la aparición de callos y durezas, que pueden volverse dolorosos si no se tratan adecuadamente.
- Fascitis plantar: La tensión y carga continuas sobre la fascia plantar pueden provocar inflamación y dolor en la base del pie, especialmente en la zona del arco.
¿Sabes como elegir los mejores pies de gato para evitar lesiones?
Si quieres evitar lesiones al usar pies de gato, te recomendamos que sigas estos consejos para evitar problemas:
Como ya hemos comentado varias veces a lo largo de este artículo, te recomendamos que no compres tallas demasiado pequeñas. Es mejor que pruebes diferentes modelos y elijas los que ofrezcan control y precisión con un buen ajuste pero sin sacrificar la comodidad. Además, es recomendable que alternes entre varios pies de gato. Así, podrías usar los más ajustados solo en rutas técnicas y recurrir a unos más cómodos para sesiones largas o de entrenamiento.
Una vez que termines la sesión de escalada es más que recomendable que dediques un tiempo a cuidar de tus pies. Mételos en una bañera con agua templada y mantelos durante unos minutos mientras los masajeas para reducir la tensión acumulada en los músculos de los pies. Además – y esto es importante – asegúrate de mantener las uñas bien cortas y rectas para evitar que se encarnen.
Apóyate en un podólogo para cuidar tus pies después de escalar
La podología es una gran aliada para los escaladores que desean cuidar sus pies y evitar problemas a largo plazo. Un podólogo especializado puede realizar un análisis completo de tus pies y pisada, identificar áreas de riesgo y recomendar tratamientos preventivos para evitar lesiones durante las sesiones de escalada. El tratamiento con un podólogo también puede incluir ejercicios de fortalecimiento y flexibilidad, así como recomendaciones sobre la recuperación post-escalada. Mantener tus pies en buen estado no solo mejorará tu comodidad al escalar, sino que también aumentará tu rendimiento y reducirá la posibilidad de lesiones en el futuro.
Soy Podólogo, Enfermero, Doctor en Podología y Director general de Clinisalud. Trabajo para mejorar la salud de tus pies y tu vida en general.