La Piña está de moda en estas fiestas, y es que como todos sabemos tiene un montón de beneficios, ya que tiene un alto contenido en agua y fibra. Es decir, que tiene un efecto saciante (que nos hace tener menos sensación de hambre) y también diurético, ayudando a eliminar toxinas a través de la orina. Uno de sus componentes es la bromelina, que nos va a ayudar a tener una mejor digestión. Por ello, la piña es buena para incorporar a una dieta si queremos perder peso, pero también como postre en comidas pesadas.
Una manera de comer piña de una forma diferente es…
Coger una piña, cortarla de manera vertical y vaciarla, quitando la parte central. ¿Cómo? Nos podemos ayudar de una puntilla o un sacabolas para que los trozos nos queden redonditos. Por otro lado, cogemos un yogurt griego – sin azúcar- y lo mezclamos con los trocitos de piña. Toda esta mezcla lo vertemos en la piña vacía y añadimos un poco de azúcar moreno por encima. También podemos reservarnos unos trozos de piña para decorar por encima o incluso hacer unas brochetas para pincharlas alrededor de la piña y alternarla con otro tipo de frutas, como por ejemplo el kiwi o la fresa, para que haya contraste de colores. Lo mejor es preparar y servir, para que no le dé tiempo a que salgan los jugos.
¡Espero que os haya gustado!
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